Consiste en 6 etapas:

a. Selección de terrenos,
b. Preparación del terreno,
c. Establecimiento de la plantación,
d. Fertilización,
e. Replante y supervivencia (al segundo año) y
f. Mantenimiento de la plantación (del año 3 al año 10).

Es responsabilidad del Ejido y/o Comunidad, velar para que todos los socios del proyecto cumplan los compromisos adquiridos, durante el establecimiento, mantenimiento y aprovechamiento de la plantación resinera.

En el caso de los pequeños propietarios, en el caso de una eventual judicialización de la plantación resinera, el predio se puede gravar hasta que haya un finiquito del financiamiento recibido.

NO. Legalmente las tierras de propiedad social son inembargables, inalienables e imprescriptibles, amparadas por la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos. Por ello no existe ningún riesgo de privatización de las tierras (Art 27 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos).

En el caso de la propiedad privada se genera como garantía un gravamen, ante el incumplimiento de la obligación podrá embargarse el bien inmueble.

• Ejido Verde se compromete a establecer una plantación forestal resinera con 800 pinos nativos resineros por hectárea en un periodo de 10 años a partir de su plantación.
• Cada poseedor, y en su caso, la Comunidad, Ejido o Pequeña Propiedad, se compromete a devolver 5,750 kg por hectárea, si es ejido o comunidad indígena, y 6,900 kg por hectárea si es un pequeño propietario.
• Cada poseedor se compromete a aplicar el Manual de Operaciones para establecer y mantener las plantaciones resineras.
• La Comunidad, Ejido o Pequeña Propiedad, una vez que haya pagado el crédito, dará preferencia en la venta de resina de pino a Ejido Verde, por un periodo de 30 años, pagándose la resina al precio que corra en plaza de mercado de este producto, LAB en Morelia.

• Generar un patrimonio familiar.
• Recuperar, productivamente, sus parcelas deterioradas.
• Mejorar el hábitat de flora y fauna de los bosques en la comunidad.
• Fortalecer y recuperar, en algunos casos, la cultura resinera.
• Generar fuentes de trabajo para los habitantes del Ejido / Comunidad
• Ingresos directos a la comunidad por aprovechamiento de resina en huertos resineros establecidos en terrenos comunales.
• Mejoramiento de servicios ambientales por establecimiento de nuevos bosques, incluyendo agua, captura de carbono, prevención de la erosión y otros.

Si. Dependiendo de la región o zona donde se encuentra el predio del interesado. Si se encuentra en un Municipio o Región donde Ejido Verde ya cuenta con Plantaciones Forestales Comerciales, es probable que se pueda incorporar una superficie menor a la requerida. Al contrario, si las áreas tienen menor superficie y son lejanas, el esquema financiero y técnico que representa el negocio se vería imposibilitado. A menos que la suma de varios interesados, Ejidos, Comunidades Indígenas y/o Pequeñas Propiedades, se agrupen en una región determinada, y se aumente el potencial y el plan de negocios.

Es un mecanismo que contribuye a una buena gobernanza local. La salvaguarda social garantiza que todo participante en las plantaciones resineras conozca el sistema de trabajo de Ejido Verde, incluyendo la información sobre los instrumentos legales, los convenios, los acuerdos y las herramientas que permiten que en la operación se respeten los derechos de los poseedores y de los núcleos agrarios. Es de gran utilidad para evitar impactos negativos de las plantaciones en las poblaciones locales. Dos elementos de una salvaguarda social son:

1. Transparencia y eficacia de las estructuras de gobierno local en el proyecto de plantaciones resineras, y
2. Participación plena y efectiva de todos los actores relacionados con la plantación.

Generalmente se utilizan herbicidas amigables con el ambiente, biodegradables, autorizados por la FSC México (Forest Stewardship Council – México) e instancias gubernamentales, incluso de calidad internacional. El objetivo del uso de los herbicidas es garantizar el control de las malezas y brindarle las condiciones ideales a la plantación.

Si, de hecho, combinamos los controles manuales o mecanizados (macheteo, pase de desvaradora con tractor) en combinación con las aplicaciones de herbicidas para garantizar un control al 100%.

En el caso del pastoreo, no es viable la incorporación de ganado vacuno, caprino u ovino ya que perjudica el desarrollo de las plantas en los primeros 7 años, bajo nuestro esquema de plantación y objetivo de producción de resina.

Una de las estrategias de prevención de incendios está referidas a trabajos de ingeniería, que incluyen el manejo de combustibles excedentes, apertura de brechas cortafuego, mismas que cortan la continuidad horizontal y vertical de los combustibles para evitar su propagación, líneas negras, quemas controladas y prescritas para reducir combustible y mejora en el manejo del fuego en caso de un incendio. Para las Plantaciones Forestales Comerciales se han considerado esencialmente la apertura de BCF.

Esta actividad está considerada dentro del paquete tecnológico y corrida financiera, así como dentro del seguro contra incendios que plantea la reposición total del área y planta afectada, sin costo adicional para el propietario.

La selección de las cinco especies está definida con la experiencia histórica de potencial productivo de resina que la empresa procesadora tiene; esta base de datos está integrada con información científica nacional e internacional de poco más de 100 años.

Sabemos que la mayoría de pinos producen resina y la selección específica de especies como altamente potenciales, es una selección realizada con investigación científica. El plan EV establece como objetivos y metas obtener de manera redituable cosechas de resina que nos permita escalar con la visión económica, ambiental y social, mejorando la calidad de vida local. Sin embargo, de manera adicional y por lógica, si además de la selección observamos en el sitio ejemplares de las especies seleccionadas, indudablemente tendrán mayor porcentaje de sobrevivencia y establecimiento, por lo que también se considera esta condición potencial in situ.

Los terrenos se preparan con maquinaria para dos fines principales: disminución de costos en la preparación del terreno y preparación exitosa del suelo que recibirá la plántula, procedente de vivero, bajo un ambiente controlado, roturación del suelo más allá de la capa vegetal superficial que permita facilidad de fijación del sistema radicular ( enraizamiento), control de plagas (al exponer el suelo de manera inversa) y mayor posibilidad de contener y permanecer agua natural y soporte durante el invierno y sequía subsiguiente, hasta volver a retomar el líquido en la próxima estación de lluvias.

Una vez efectuado el proceso de manejo del suelo con maquinaria, sin vegetación nativa, se tendrá mayor facilidad de introducir cada plántula en el espaciamiento definido entre planta y planta que se eleva a 1,100 plantas por ha. Al respecto, algunas de las plantas se desechan por selección natural y otras condiciones, deberán eliminarse en el proceso para que la competencia de nutrientes, espacio, luz y agua, así como del propio manejo de la plantación, queden finalmente 800 plantas en el décimo año.

El objetivo es establecer la plantación de la forma correcta para evitar los replantes, sin embargo, por experiencia, sabemos que siempre va a existir mortalidad en las áreas sembradas. Normalmente manejamos una mortalidad del 15% como máximo y ese replante siempre se debe realizar el mismo año de la plantación o más tardar un año después.

En el mercado se encuentra una variedad de productos químicos amigables con el ambiente, que no dejan huella de contaminación permanente, para control específico. Pensar en erradicar una plaga no sería justo exponerlo de esa manera, dado que se requerirían productos potentes -no autorizados por las Autoridades respectivas- que dañarían al ambiente, a la biodiversidad, a la cadena trófica. Por eso, Ejido Verde tiene seleccionados productos para cada plaga o enfermedad potencial que pudiera presentarse en las Plantaciones Forestales Comerciales.

Además de esto, existen variantes de control domésticas, locales y regionales, para algunas plagas como para la tuza y la ardilla, mismas que podrían sumarse a las propiciadas con el control químico. Seguramente también podría sumarse algunas estrategias de control biológico, como perros de caza y eliminación directa con escopeta.

Considerando cumplir estrictamente con la totalidad de las actividades en tiempo y forma contenidas en el plan de negocios, paquete tecnológico y corrida financiera de Ejido Verde. Participando permanentemente en el proceso de la plantación incluyendo las actividades de protección.

Coordinación y asesoría permanente de actividades con el técnico EV. En el proceso de evaluación anual o semestral, revisar los apartados de amenazas y efectuar las acciones correctivas para evitarlas o reducirlas al máximo que pongan en riesgo tan solo un árbol, que potencialmente podría verse reducida en la producción esperada.

En un principio se trata de estimular la participación de territorios sociales en este proyecto, es decir, de ejidos y comunidades indígenas. Normalmente, son parcelas muy fragmentadas que no rebasan las 3 hectáreas, por lo que las utilidades de los poseedores de esas plantaciones serán reducidas. Además, los poseedores deberán contribuir a sus comunidades con un porcentaje o cuota económica -por kilogramos de resina- por la autorización de las asambleas para que ellos puedan establecer sus plantaciones.

Por otro lado, los terrenos particulares o pequeñas propiedades rebasan con frecuencia las 10 hectáreas (hemos encontrado propietarios de más de 100 ha), por lo que su margen de utilidad será más alto en el mediano y largo plazo.

La pequeña diferencia entre ambos tipos de propiedad -1,150 kg/ha- es una compensación por ese concepto.

Una vez firmado el convenio solidario, EV integra el Programa de Manejo para establecer la plantación que incluye la posibilidad el aprovechamiento de resina y madera al undécimo año y al año 30. Así mismo informa a la SEMARNAT, CONAFOR y COFOM respecto a los potenciales convenidos a fin de que los incluya dentro de sus programas de subsidios, que se emiten a través de reglas de Operación en forma anual o hasta adicionales dentro de un mismo año. El subsidio varía, pero se estima por parte de la CONAFOR en $15,000 pesos por hectárea, que se abonan a la inversión que Ejido Verde realiza y se descuentan del mutuo a los Poseedores de tierra.

El subsidio o apoyo se considera seguro si se emiten las Reglas de Operación y se cumplen las especificaciones técnicas y legales que considera para los diversos interesados.

Para verificar en el Registro Público de la Propiedad su estado legal, con o sin gravamen, lo que restringiría o no la aceptación como elemento legal en el Convenio por suscribir. La entrega en foto o escaneada no le compromete a nada y tampoco se utilizará para algún fin distinto a la sola verificación del estatus legal ante el Registro Público de la Propiedad. Si es aceptada la propuesta y efectuado el convenio, las escrituras serán parte de la carpeta por integrar para el proceso de Plantaciones Forestales Comerciales.

Básicamente al compromiso de venta-compra del excedente entre el propietario de PFC y EV, después de apartar el 15% mínimo obligado a pagar (mutuo) por el financiamiento otorgado.

Lo anterior representa un importante proceso económico, social y ambiental , dado que de iniciar una actividad productiva silvícola a partir de solo un terreno desnudo de vegetación arbórea, efectuar una plantación que potencialmente producirán bienes y servicios ambientales ( captación de agua, fijación de suelo, coto de fauna silvestre, captura de carbono, entre otros) y el aprovechamiento de resina de 800 árboles/ha al cabo de 11 años, hasta 20 años posteriores bajo un esquema de mercadeo seguro y conveniente.

Actualmente nos encontramos en:

Ario, Cherán, Paracho, Nahuatzen, Uruapan, Tangancícuaro, Zacapu, Zinapécuaro, Salvador Escalante, Tacambaro, Pátzcuaro, Pomacuaran, Tirindaro, Santa Cruz Tanaco, Angahuan, Cherán Atzicurín, Turícuaro.

Lo ideal es antes de que cumpla los 4 años, deben cumplir con el requisito de la edad, además, con otros aspectos técnicos, tales como:

• Tiene que ser especie de pino resinero, Pseudostrobus, Oocarpa, Pringlei, Lawsonii y Leophylla primordialmente.
• Debe tener una densidad mínima de 800 árboles/ hectárea.

Contamos con un área dentro de la empresa, que se encarga de captar resina bosques naturales y plantaciones forestales comerciales que ya son productivas. Esta área presta toda la asesoría técnica y un pequeño financiamiento para compra de tambos de 200 litros, viseras y vasos de recolección, adicionalmente facilita todos los trámites para conseguir las guías de movilización de resina. Este proceso se tiene pensado implementar una vez nuestras plantaciones inicien con el proceso de resinación, pero la responsabilidad del aprovechamiento de la resina una vez la plantación cumpla con la edad es netamente de la comunidad, ejido, poseedor o pequeño propietario.